martes, 30 de abril de 2013

El sermón del nuevo párroco.


Antes de su segundo sermón, el domingo siguiente, le preguntó al arzobispo
como podía hacer para relajarse. Éste le sugirió lo siguiente: "la próxima
vez, coloque unas gotitas de VODKA en el agua bendita y ya verá que
después de algunos trago estará  más relajado".

El domingo siguiente el sacerdote aplicó la sugerencia y en efecto, se
sintió tan bien que podía hablar en medio de una tempestad, totalmente
relajado.

Después del sermón, regresó a la sacristía y encontró una nota del
Arzobispo que decía lo siguiente:

"Querido padre: La próxima vez, coloque unas gotas de vodka en el agua y no
unas gotas de agua en el vodka. Le adjunto algunas observaciones para que
no se repita lo de hoy:

*No hay necesidad de poner una rodaja de limón en el borde del cáliz.

*La caseta de al lado del altar es el confesionario, y no el baño.

*Evite apoyarse en la imagen de la virgen y mucho menos abrazarla y besarla.

*Existen 10 mandamientos y no 12.

*Los apóstoles eran 12 y no 7, y ninguno era enanito.

*No nos referimos a nuestro señor Jesucristo y sus apóstoles como "J.C. y
sus boys".

*David derrotó a Goliat con una honda y una piedra. Jamás "le pateó los
huevos"..

*No nos referimos a Judas como ese "traidor hijo de puta".

*No debe tratar al Papa como "El Padrino".

*Bin Laden no tuvo nada que ver con la muerte de Jesús.

*El agua bendita es para bendecir y no para refrescarse la nuca.

*Nunca rece la misa sentado en la escalera del altar y menos con el pié
encima de la Biblia.

*En el ofertorio los fieles entregan el diezmo voluntario, saque el
letrero que dice "su propina es mi sueldo".

*Los pecadores se van al infierno y no a "tomar por culo".

*El padre nuestro se debe rezar alzando las manos al cielo, no haciendo
"la ola".

*La iniciativa de llamar al público para bailar fue buena, pero hacer "una
conga" por toda la iglesia, NO!!.......

*Y por último, y lo más importante, aquél maricón de fucsia, travestorro
con faldita, sentado en el rincón del altar, era yo!

Atentamente: EL ARZOBISPO