martes, 15 de noviembre de 2011

Marathón II

LA JUSTICIA QUE NO VE
-¿Por qué hizo el falsificador los billetes de once euros?
-Pues para ganarles algo.
-Yo sólo conozco la prisión de oídas, es que siempre que me llevan ahí, voy ciego.
-¿Por qué se le acusa?
-Por manía, vicio o costumbre, ¡Yo qué sé!...
-¿Le han leído sus derechos?
-¿Para qué? Si yo sé leer solito.
-¿Tienes que añadir algo al robo de éste traje?
-Si, señor juez, la camisa, la corbata y los zapatos.
-¿Alega usted que ha sido torturado?
-Si, señor juez. El comisario puso varios discos de Julio Iglesias durante el interrogatorio.
-Todo empezó en mi infancia: como no había juegos en el parque, pues me la pasaba saltando bancos.
-¿Y cuántos años me pueden caer, señor abogado?
-Si me presta una calculadora, en una media hora aproximadamente se lo digo.
-Perdone, ¿este es el Gremio de Comerciantes?
-No, es el Tribunal Superior de Justicia.
-Es igual, ¿no les interesaría una báscula digital?
-Mi suegra se quejó al juez, y nada. Al comisario, y nada. A las feministas, y nada. A la Protectora de Animales, y me trincaron.
-...Y me condenaron a mil quinientos años de prisión.
¿Y cómo has salido antes? ¿Te has escapado?
-No, es que ya se murieron todos los que me condenaron.
-¿Y cómo puede explicar un historial delictivo tan amplio?
-Es que siempre me gustó la historia.
-Usted robó todos estos billetes de lotería, ¿verdad?
-Si, señor juez, pero a ninguno le tocó el premio.
-¿Por qué le robó el anillo a esta señorita?
-Yo sólo la ayudé a quitárselo porque le iba muy apretado.
-Adiós, abogado sin título.
-Adiós, título sin abogado.
-No se preocupe, que el pensamiento siempre queda libre.
-Pues ya le vendrá a pagar mi pensamiento, abogado.
¡¡Y como no va a tener el brazo largo la justicia, si se pasa todo el tiempo sosteniendo la balanza!!
-La justicia es ciega. Si, tiene el brazo largo y la vista corta.
-Me condenaron a treinta días de cárcel.
-¿Y dónde pasabas las noches?
-¿Y cómo es que usted tiene tantas letras protestadas?
-Es que soy cantante de protesta, señor juez.
-Y lo peor, es que nadie me va a creer que una mujer me ha violado.
-Me han dicho que lo pescaron con las manos en la masa.
-¡Claro! Soy panadero.
-¿Vas a confesar tus fechorías?
-Soy muy malo para recordar fechas, Señoría.
-Su mujer lo acusa de malos tratos.
-¿Sobrevivió?
-Así que usted creció en la prisión, ¿verdad?
-No, señor juez. Soy enano.
-Ya le he dicho que un examen de matemáticas no es prueba suficiente, señor abogado.
-¿Cuál es su último deseo?
-Pero si ya no hay pena de muerte.
-No, pero tiene usted un cáncer de caballo.
-Yo soy una blanca paloma, señor juez.
-Claro, si no, no la cagarías tanto.
-Escondan sus carteras, que ya ha llegado el abogado.
-...Me dijeron que cantara, canté, la cárcel se inundó y me escapé nadando.
-¡Mientes!
-¿Cómo lo has descubierto?
-Porque tú no sabes nadar.
-¡Alégrate! Te han rebajado la condena. Dormirás en la celda del sótano.
-En la cárcel dormí en la misma cama que habían dormido Al Capone, el Padrino, Lucky Luciano y otros más.
-¿Y cabíais todos?
-¿Ya te han soltado?
-Lo dices como si me hubieran puesto un collar.
-El otro día me tocó un juez tan educado que en lugar de llamarme "chorizo" me decía "embutido".
-¿Y usted de qué trabaja habitualmente?
-Si tuviera un trabajo habitual no andaría robando, Señoría.
-Señor abogado, ¿cree que ganará mi pleito?
-No se preocupe, gane o pierda yo siempre gano.
-¡Mira! Un fiscal procesado por evadir al Fisco.
-Los guardias son unos "chorizos".
-¿De dónde sacas eso?
-Es que no ves que siempre están aumentando los Juzgados de Guardia...
-Ahora sí que siento el peso de la Ley.
-¿Te arrepientes?
-No; Es que me está pisando Su Señoría.


UN POCO DE TODO PARA REÍR
-¿Qué le dice Tarzán a un ratón?
-¡Tan pequeño y con bigote!
-¿Y qué le dice el ratón a Tarzán?
-¡Tan grandote y con pañales!
Entra un borracho a su casa todo manchado con lápiz labial por todos lados hecho un desastre, y la mujer le pregunta:
-¿Hombre que te pasó?
Y el borracho responde:
-¡No me vas a creer! ¡Me peleé con un payaso!
-Do you speak English?
-¿Cómo dice usted?
-Do you speak English?
-¡No lo entiendo!
-Le pregunto que si habla usted Inglés.
-¡Ah sí, perfectamente!
-No desayuné pensando en ti, no almorcé pensando en ti, no cené pensando en ti, y no dormí porque tenía mucha hambre.
-A ver Luis, ¿cómo te imaginas la escuela ideal?
-¡Cerrada, señorita!
Este era un bebé tan feo, que cuando nació, el médico dijo:
-Señora, lo tiramos al aire, y si vuela, es un murciélago.
Pasa un entierro con miles de personas, un señor pregunta:
-Oiga, ¿sabe usted quién es el muerto?
Y el otro contesta:
-No estoy seguro, pero me parece que es el que va dentro de la caja.
Va Caperucita Roja por el bosque, se encuentra con el lobo feroz y éste le pregunta:
-¿A donde vas Caperucita?
-A lavarme el coño al río.
Y el lobo contesta: -¡Joder cómo ha cambiado el cuento!
Un señor iba al funeral del hermano de un amigo. Cuando llegó al funeral, todavía no habían empezado y el señor aprovechó para preguntarle a su amigo:
-¿Cómo se murió tu hermano?
-Tiró un cigarrillo por la azotea.
-¿Y por qué murió por tirar un cigarrillo?
-Es que se le olvidó soltarlo.
Un par de borrachos caminaban por la acera, cuando pasa junto a ellos una señora gorda, muy gorda, y uno de ellos le dice al otro:
-¡Mira, ahí va un tanque!
La señora que lo escuchó se volvió y de repente le soltó un bolsazo en la boca, y el otro agrega:
-¡Y es de guerra!
Había un bebé gateando, y de pronto se encontró una hormiga, y el bebé le pregunta:
-¿Hormiguita, a donde vas?
La hormiguita le contesta:
-A mi casa.
El bebé la aplasta y dice:
-¡Ibas!
Un hombre irresponsable y que se había portado muy mal con su pobre familia, muere al fin. En el acto del entierro, un pariente lejano pronuncia la oración fúnebre:
-Fue un esposo modelo y un padre ejemplar.
Al oir eso la viuda toma de la mano al niño que está a su lado y le dice:
-¡Vámonos hijo! ¡Nos equivocamos de entierro!
En la sala de maternidad el jubiloso padre tomaba fotos de su bebé recién nacido. Le pregunta la enfermera:
-¿Su primer hijo, señor?
-No, ya tengo cinco. ¡Es mi primera cámara!
Un señor llega al doctor con su bebé en brazos.
-Doctor, doctor, mi hijo tiene 6 meses y no abre los ojos.
El doctor le hace un chequeo al bebé y le dice al padre:
-Señor, el que debe abrir los ojos es usted, este bebé es chino.
Llega un patrón a la casa de otro y pregunta al portero:
-¿Está el patrón?
-No, se fue a un entierro.
-¿Tardará mucho en volver?
-No sé, iba en el ataúd.
Estaba un señor en un funeral, al lado del señor estaba la viuda y el señor le dice:
-Pensar que las últimas palabras me las dijo a mí.
Y la viuda pregunta emocionada:
-¿Y cuáles fueron?
El señor le contesta:
-¡¡Cabróóón, no te lleves la escalera!!
Un empresario tiene que escribir una carta de recomendación para un empleado más bien vago. No quiere mentir acerca de su empleado, pero tampoco quiere decir la verdad. después de una cuidadosa reflexión, escribe en la carta de recomendación:
"Usted será afortunado si consigue que esta persona trabaje para usted."






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