El Sr. Gómez le dice a su esposa un tanto irritado:
-¡María; todo el tiempo dices tonterías! ¿No podrías contar hasta diez antes de abrir la boca?
A la tarde del día siguiente, la Sra. Gómez se pone a contar muy lentamente:
-Siete... ocho... nueve... diez... ¡Juan, tu baño está a punto de desbordarse!
Durante la Segunda Guerra Mundial, un general de cierta edad, acababa de casarse con una mujer bastante más joven que él.
El acontecimiento llega a oídos de un coronel enemigo y éste comenta con la tropa:
-¡Tengo buenas noticias! -Dice de forma perversa- El general enemigo se ha casado con una jovencita, así que tendrá dos frentes que defender ahora.
En el conservatorio de arte dramático, un profesor explica:
-¡Nada es más fácil que construir una pieza de teatro! Primer acto: Un hombre encuentra a una mujer. Segundo acto: Le coge la mano. Tercer acto: Por fín, la abraza.
Un alumno interviene y le responde:
-Señor, -dice- yo he seguido escrupulosamente ese método, y eso me ha valido seis meses de prisión.
-¡No lo comprendo! -dice el profesor.
-Hay que precisar, -responde el alumno- que yo escribí una pieza de cinco actos, y al final del quinto, violaba a mi compañera.
Una leyenda popular, cuenta que el tamaño del pie masculino da indicaciones precisas sobre las hazañas amatorias de las que es capaz un hombre.
Una señora con abundante curiosidad sobre el tema, se entusiasmó a la vista de los zapatos de un joven empleado de correos que le trajo un telegrama.
Se las ingenió como pudo para atraerlo al dormitorio donde se libraron algunas escaramuzas amatorias. Después de lo cual, ella le despidió diciendole con cierta condescendencia:
-Un buen consejo jovencito: en el futuro no te compres zapatos del 43... ¡Tu pie es un 38 pequeño!
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